Traducción por Luicnda Loveland, de las palabras de Elizabeth Gilbert, autora de Come, Reza, Ama.
Hace unos meses, yo estaba en el escenario con Rob Bell – ministro, maestro, hombre de familia, gran tipo – y una mujer en la audiencia le hizo esta pregunta:
“Estoy haciendo todos estos cambios importantes en mi vida, y estoy creciendo de muchas maneras nuevas y emocionantes, pero mi familia me está resistiendo, y me siento como su resistencia me está frenando. Ellos parecen amenazados por mi evolución como persona, y yo no sé qué hacer al respecto.”
Rob dijo: “Bueno, por supuesto que están amenazados por su evolución como persona. Estás interrumpiendo toda su visión del mundo Recuerde que una familia es básicamente un gran cubo de cangrejo -.. Cuando uno de los cangrejos sube y trata de escapar, los otros cangrejos lo agarraran y lo tiran hacia abajo.”
¡Lo cual me pareció un comentario muy inesperado viniendo de un ministro y un hombre de familia!
Rob me sorprendió aún más, continuó diciendo, “Las familias son instituciones – al igual que una iglesia, al igual que el ejército, al igual que un gobierno. Su sentido de su estabilidad depende de mantener a la gente en su lugar correcto. Aunque la estabilidad se basa en la disfunción o la opresión. Cuando se mueve fuera de su “lugar correcto” usted amenaza su sentido de orden, y puede muy probablemente intentar tirarlo de vuelta hacia abajo “.
Y a veces, en nuestra lealtad a la familia (o en nuestra lealtad equivocada a la disfunción que estamos acostumbrados) podríamos voluntariamente rendirnos y sacrificar nuestro propio crecimiento, con el fin de no perturbar la familia—y nos alojaremos en el cubo de cangrejo para siempre.
Grupos de amigos pueden hacer esto a los demás, también. Mi amiga Rayya Elías era un adicta a la heroína durante muchos años, y vio el mismo fenómeno aplicado con sus amistades en el mundo de las drogas: Un yonqui trataría de mejorar, y los otros instantáneamente la tirarían hacia abajo en la adicción de nuevo. Yo he visto suceder, también, cuando las amistades tratan de echar de perder los esfuerzos de otro amigo para bajar de peso o dejar de fumar, o dejar de beber, o hacer ejercicio. (La mentalidad de: “Si no puedo salirme de este cubo de cangrejo, NADIE se sale de este cubo de cangrejo.”)
Cuando publiqué mi primer libro, yo estaba trabajando como mesera, y cuando compartí mi noticia feliz con mis compañeros de trabajo, uno de los gerentes dijo con ira real “, no se te ocurra ir a tener éxito. Eso no era el acuerdo “. (Y, en silencio, yo estaba como: “¿? El acuerdo? ¿Qué acuerdo?”) Esa persona nunca me perdonó, en realidad, por aspirar a salir de ese cubo de cangrejo.
No todas las familias (o agrupación familiar) es así, por supuesto. Algunas familias alientan a sus miembros no sólo para subir, pero a elevarse, a volar lejos. Esa es la verdadera gracia – a querer que alguien crezca, incluso si esto significa que podrían superarte.
Pero otros intentan con todas sus fuerzas para detenerte, para tirarte abajo en el cubo de cangrejo y otra vez.
Si esto está sucediendo en su vida, debe identificarlo y resistirlo.
No dejes que te impidan crecer.
Como dijo Rob Bell bellamente: “Si la gente te quiere, ellos querrán que crezcas. Si alguien no quiere que crezcas, puede nombrar los sentimientos de esa persona hacia usted por muchos nombres … pero no puedes llamarlo amor … puede llamarlo miedo, se le puede llamar ira, se puede llamar problemas de controlar, se le puede llamar el resentimiento … pero nunca nadie ha detenido a alguien a causa del amor.”
Queridos, si es el momento para que usted pueda crecer, usted tiene que crecer.
Si es el momento para que usted cambie, usted tiene que cambiar.
Si es el momento para que usted se mueva, usted tiene que moverse.
Si es hora de que te arrastras finalmente fuera de ese cubo de cangrejo, iniciar el rastreo.
Sostenerse en orden para hacer felices a los demás no te servirá, y – en última instancia – no servirá a ellos, tampoco.
Sea cariñoso, compasivo, se amable, se perdonador. Pero si es hora de que se ha vaya, ya váyase.
(Y no hace falta decir, si usted es el cangrejo en el fondo de un cubo que está sosteniendo otro cangrejo que escape, podría ser el momento para reunir todo su amor y todo su valentía y suavemente, generosamente, dejarlo ir. No será fácil, pero podría ser la cosa más importante que haga.)
(Foto cortesía de http://nilsolgersson.blogspot.co.uk/)